1) Redacta una justificación del tipo de lenguaje empleado:
El fragmento extraído de la obra teatral de José Luis Alonso de Santos, Bajarse al moro, utiliza un nivel popular del lenguaje, como puede reflejarse en el uso recurrente de expresiones en la conversación que mantienen los personajes tales como "No te digo...", "Anda que...", "Tan pirada como siempre", "En casa de esta", "Nos hemos conocido anoche", "Si no cabemos, tía" y que en ocasiones se acerca a la jerga propia de algún grupo social y cuya fundamentación viene dada en los rasgos sociales de los personajes, sobre todo de Chusa y Jaimito, y no en la situación comunicativa: "Tenemos maría", "Tú tienes mal la caja", "Hasta que se baje al moro conmigo", "Pues que haga un cursillo, no te jode". Así pues, hablaríamos del uso de un sociolecto, y por lo tanto, es la variedad diastrática de la lengua lo que se refleja, y no la diafásica, ya que esta viene dada en la adecuación del discurso en función de las circunstacias.
Se trata de un lenguaje oral no planificado que se presta a la espontaneidad conversacional.
2) Comenta el texto atendiendo a las cuatro máximas conversacionales propuesta por Paul Grice:
Según Paul Grice, para que toda conversación llegue a buen puerto, es necesario que se den cuatro máximas que jamás deberían ser transgredidas. En el texto trabajado, las cuatro máximas son incumplidas, dado que la información aportada no se ciñe al adecuado uso de las mismas. De este modo, la primera de ellas, la máxima conversacional de la cantidad, es violada en el momento en el que se aporta más información de la necesaria. Un ejemplo lo encontramos en el momento en el que Chusa presenta a Jaimito como su primo. Hasta ahí, todo correcto. La transgresión se lleva a cabo en el momento en el que añade que "tiene un ojo de cristal y hace sandalias", información totalmente banal dada la verdadera intención comunicativa de Chusa, que simplemente consiste en comunicar a su primo que su nueva amiga, Elena, va a quedarse una temporada con ellos en su casa.
El uso de la ironía en algún caso incumple la norma de la cualidad. No solo es necesario aportar datos verdaderos, sino que deben parecerlo. La ironía, por su parte, puede dar lugar a confusión por parte el receptor. Por ejemplo: "¿Quieres también mi número de carné de identidad?", cuando lo que verdaderamente quiere dar a entender es que está dando información en exceso sobre él, o en el momento en el que, también usando la ironía, Jaimito añade "pues que se haga un cursillo".
La máxima de la relación o relevancia queda transgredida al añadir más información que no viene al caso como en "¿Quieres un bocata?" "Pon tus cosas ahí. Tenemos maría plantada, pero casi no crece".
Por último, la máxima de manera se incumple en el momento en el que se van solapando unas informaciones con otras y que pueden crear ambigüedad y confusión debido, en algún caso, a la falta de orden en el enunciado: "He estado en casa de esta. ¿A que sí, tú? No se atrevía ir sola a por sus cosas por si estaba su madre. ¿Quieres un bocata?".
¡Aquí os dejo el enlace que os mostrará la escena que habéis analizado!
ghttps://www.youtube.com/watch?v=3P9i7BeaO6g
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